‘La actitud, la pasión y la ambición son formas de ser que los deportistas del Benfica deben demostrar y alimentar todos los días: dentro y fuera del terreno de juego’.
Éste es uno de los lemas inspiracionales que los futbolistas del Benfica leen cada día impreso en grandes letras rojas sobre una de las blancas paredes de la Caixa Futebol Campus, la moderna y funcional Ciudad Deportiva que el club lisboeta tiene en la localidad de Seixal, a escasos 25 kilómetros de la capital portuguesa.
Estas instalaciones, conocidas popularmente como la Academia del Benfica, reflejan la vocación de grandeza del club encarnado, el que más socios tiene en todo el mundo (250.000) y que tras ganar la Liga portuguesa aspira a tres títulos más en una semana (Copa de la Liga —esta noche ante el Río Ave—, la Europa League —el 14 frente al Sevilla— y la Copa de Portugal —el 18, también ante el Río Ave—).
Una sobresaliente tarjeta de presentación deportiva, que unida a una brillante gestión económica, convierte al ‘club del águila’ en un modelo futbolístico a seguir muy de cerca. El Benfica es un ejemplo de eficiencia en la gestión de recursos, cuyo último hito (más allá de los títulos o de su presencia habitual en las finales locales o europeas) es el sistema de explotación de los derechos televisivos, rompiendo con el mercado tradicional y ofreciendo los partidos a través de su propio canal.
Este modelo, pionero en el mundo, ha provocado que el Benfica multiplique por más de tres sus ingresos televisivos, pasando de los 7,5 millones que recibía del operador la temporada pasada a los 28 millones que ha logrado en este ejercicio, gestionando ellos mismos la explotación.
Cuenta de resultados
BenficaTV se ha convertido en un importantísimo negocio en la cuenta de resultados de la entidad, que ya piensa en aumentar su cuota de mercado con algunas acciones significativas. Por un lado, ofrecerá a sus suscriptores (que ven el canal a través de alguna de las dos grandes plataformas que operan en Portugal) la posibilidad de ver los partidos desde cámaras subjetivas: situadas en el banquillo, en la portería, etc: A cambio de ese contenido premium y de ese valor añadido, el aficionado pagará más, lo que reportará más ingresos.
Y, por otro lado, cambiará su nombre (pasando a llamarse BTV) para acceder a aficionados de otros equipos reacios a suscribirse a una tele llamada ‘BenficaTV’ (para hacerse una idea, piense el lector español en Real Madrid TV para un aficionado del Barça, o viceversa). Los rectores del club piensan que así su televisión, que también adquirió los derechos de la Premier League en Portugal, puede aumentar los 300.000 abonados con los que ahora cuenta: el doble de las previsiones iniciales hace solamente un año.
Joao Gabriel, director de comunicación del club y una de las personas que forman el núcleo duro en torno al presidente Luis Filipe Vieira, habla con indisimulado orgullo de BenficaTV, cuya redacción la forman un centenar de personas y que a través de sus dos canales emite entre 10 y 12 horas de producción propia diferente cada día.
Pero igual de satisfechos con la tele (siempre sin olvidar los éxitos deportivos) se muestran los directivos con la Academia de Seixal, otra de las joyas de la corona.
El complejo deportivo, construido sobre 15 hectáreas, fue inaugurado en 2006 y aún sigue creciendo con la creación de nuevos campos de fútbol. Allí comparten entrenamientos, instalaciones y tiempo libre los futbolistas del primer equipo y los chavales de la cantera. Los 124 chicos de las categorías inferiores se forman como futbolistas en un entorno idílico y con las máximas prestaciones deportivas. «Como futbolistas y como personas —añade ufano Armando Carneiro, director de la Academia— tenemos un 91% de éxito escolar». Del éxito deportivo baste reflejar el dato de que el Benfica tiene 46 chavales en las selecciones inferiores de Portugal, o el reciente subcampeonato de la Champions juvenil (perdieron la final ante el Barça).
Preceptos del club
El trabajo estrecho junto al primer equipo aporta a los niños una identificación extra con los preceptos del club, aspecto que aumenta con la presencia de un exjugador benfiquista en el cuadro técnico de cada equipo de la cantera. Desde pequeños se les inculca la filosofía encarnada:‘En el campo, todos los futbolistas del Benfica deben tener una actitud combativa y vencedora, por respeto a los millones de aficionados que vibran y sufren con los resultados del equipo’, reza otro eslogan en la zona de vestuarios de Seixal. Estos preceptos actúan como primera piedra sobre la que se construye el estilo ganador del club, demostrado nítidamente esta misma temporada.
Poco tiene que ver esta situación actual, de florecimiento económico y deportivo, con el desolador panorama que vivía el club hace solo una década. En 2003, Luis Filipe Vieira se hizo cargo de una entidad que venía prácticamente de la bancarrota. El glorioso Benfica estaba en quiebra y había que reconstruirlo. «El club se reimpulsó utilizando la fuerza de sus socios», explica Miguel Bento, director de marketing y desarrollo. Con el nuevo estadio de Da Luz como eje angular, los directivos encarnados idearon infinidad de acciones con las que inter-relacionaron a los aficionados con los patrocinadores, «actuaciones como, por ejemplo, importantes descuentos para nuestros socios al repostar en las gasolineras Repsol, que no solo generan beneficios para las tres partes, sino que también mucha complicidad», añade Bento.
«Hay que tener en cuenta que el 50% de los aficionados portugueses son del Benfica —indica el CEO del club, Domingos Oliveira— algo que no ocurre en ningún otro país. Esa es nuestra gran fuerza». La clave era rentabilizar ese potencial en un país de poca población y con una Liga de escaso peso. Y lo consiguieron apuntalando el crecimiento sobre su enorme masa social a través de una inagotable catarata de ideas y propuestas, que demuestran el carácter emprendedor del club. Por ejemplo, las cuatro gradas de Da Luz están vendidas a cuatro patrocinadores diferentes, los 156 palcos VIP del estadio están todos adquiridos por empresas y grupos de particulares (que incluso pueden hacer uso de ellos en días sin partido), el museo del club (junto al estadio) se ha convertido, apenas 10 meses después de su inauguración, en el más visitado de Portugal...
Este mecanismo de crecimiento económico sustentado sobre el pilar social ya está dando importantes réditos deportivos. Ahora, el propósito es mantener el nivel con los frutos que vaya dando la Academia de Seixal, hacer que la televisión siga creciendo y expandir la marca por China y Asia. Y, por supuesto, seguir celebrando títulos. Uno de ellos, tendrá que ser con permiso del Sevilla...